Observando la ciudad, un día de caminar en La Cinta Costera

Hace ya rato no me iba a caminar a la Cinta Costera, pero me decidí a ir y fui. Día en el que llegar hasta ahí me tomó una hora, en donde el tráfico era largo y por ello preferí hacerlo así, caminando luego de ir ya a 30 minutos de el lugar iba a ir. Creo es lo mejor podemos hacer en estos días en donde el caminar representa tanto para nuestra respiración como para nuestra vida. Parece mentira pero el 80% de las personas nos encontrábamos caminando o corriendo en su caso, éramos mujeres, raro no? Qué ha pasado con los hombres, prefieren quedarse en casa, y luego a las chicas no caminan o se conservan preguntarles y por qué te has engordado, bueno esa es una teoría, la verdad supongo es diferente en cada caso. Al caminar me percaté de algo, todas teníamos un objetivo, algunas lo hacíamos por diversión, otras se les veía una cara triste, otras meditaban y los chicos por alguna razón nunca entenderé solo se acercaban a piropear, al menos reaccionaban si hay que decirlo de alguna manera. En mi caso fui porque para mí el olor de la brisa y el mar es como una desintoxicación a la ciudad y al tráfico, porque a veces a pesar salgo de casa, el ver tantas calles y no ver naturaleza siento me asfixia.